El papa Francisco, quien murió este lunes a los 88 años, dejó el legado de una Iglesia más universal, que representará a todos los rincones del mundo y no solo a Europa, con especial atención a países lejanos, tras el nombramiento del 80 por ciento de los 135 cardenales que formarán parte del cónclave que entrará en la capilla Sixtina para elegir a su sucesor.
Los cardenales latinoamericanos que entrarán en la Capilla Sixtina son los mexicanos Francisco Robles Ortega y Carlos Aguiar Retes; el cubano Juan de la Caridad García Rodriguez, el guatemalteco Alvato Ramazzini Imeri y el nicaragüense Francisco Brenes.
También cuatro argentinos: el prefecto del Dicasterio de la Doctrina de la Fe, Víctor Manuel “Tucho” Fernández; el arzobispo de Córdoba, el jesuita Ángel Sixto Rossi; el arzobispo de Santiago del Estero, Vicente Bokalic y Mario Poli, arzobispo emérito de Buenos Aires,
Siete son los cardenales brasileños: João Braz de Aviz, Pedro Scherer, Orani João Tempesta, Leonardo Steiner, Sérgio da Rocha, Jaime Spengler y Paulo Zeza Costa.
Además del chileno Fernando Natalio Chomali – ya que el español Celestino Aos cumplió 80 años el 6 de abril – mientras que también se incluyen en la lista el ecuatoriano Luis Fernando Cabrera, el paraguayo Adalberto Martínez Flores, el peruano y arzobispo de Lima Carlos Castillo, y el uruguayo Daniel Fernando Sturla Berhouet.